Las personas que comparten su tiempo y dedicación con los proyectos de Itaka – Escolapios son nuestros corazón, el motor que nos mueve, el elemento más querido que lleva ánimo y estilo a toda la Red…

Otras muchas personas colaboran también mucho con su profesionalidad, con su aportación económica, con su cariño… y también estamos muy agradecidos a ellos.

Pero siempre quien ofrece su voluntariado es signo de nuestra identidad de dar sin esperar nada a cambio, signo de gratuidad… y de descubrir que la vida solo sirve si sirve a los demás.