Después de los primeros 10 años de Itaka-Escolapios Madrid, ¡cambiamos de nombre!

Nuestro Programa Socioeducativo de atención en medio abierto para niñas, niños y adolescentes se llamará AKÄR.

Aunque nuestras familias, participantes, voluntariado seguirán diciendo “voy a itaka”, “hoy tengo trastévere” o “voy al Centro Socioeducativo Calasanz” hoy os presentamos los motivos que sustentan dicho cambio.
——–
AKÄR, significa RAÍZ, en bahasa indonesio.

La raíz, tanto en el contexto botánico como en el crecimiento humano, desempeña un papel fundamental en el desarrollo y sustento de algo más grande.

No es difícil para nosotras echar la vista atrás y recordar uno a uno nombres, rostros, historias de vida compartida con tantos y tantos niños,niñas y adolescentes a lo largo de estos años. Sin duda hemos ido aportando elementos clave para su desarrollo personal, para poder sustentar y sostener un proyecto de vida más grande, en cada una de ellas.

Por eso hoy podemos hablar de cómo el Centro Socioeducativo (incluso antes de serlo) supone y ha supuesto siempre cuidado, crecimiento y acompañamiento. No es difícil imaginarnos sus vidas como si de un árbol se tratara. Rápidamente identificamos las partes y sabemos dónde aportamos significativamente: es en la raíz en lo más profundo, donde habita el tesoro, Dios mismo y todo el potencial que alberga.

AKAR es RAÍZ: Nutriente, fermento, tierra fértil, espacio seguro, es arraigo, pertenencia y aportación al mundo. Es un espacio construido entre todas y todos, estabilidad y crecimiento.

La raíz es invisible a los ojos, pero nosotras, como educadoras y educadores escolapios sabemos ver con los ojos del corazón, y vemos siempre el potencial de la raíz en cada uno de nuestros niños, niñas, adolescentes y jóvenes.